Concierto Grosso Nº IV en La menor, HWV 322 – Georg Friedrich Haendel
El Concerto Grosso («Concierto Grande») fue la forma de música instrumental más importante del Barroco y en su composición destaca la presencia de dos conjuntos instrumentales que interactúan mediante una «confrontación». Dotados de una gran variedad formal, Haendel escribió los doce conciertos del Op. 6 en apenas un mes, con idea de que se interpretaran durante los intermedios de sus oratorios y odas. Desde el majestuoso Larghetto Affettuoso a los ritmos nerviosos del movimiento final, el Concierto Grosso Nº IV es un buen ejemplo del talento de un alemán que logró conquistar el corazón de los ingleses con su renovada música.
Concierto para Cuerdas en Sol menor, RV 156 – Antonio Vivaldi
En los primeros años de 1700, época en la que la mayoría de los compositores italianos eran reconocidos por sus óperas, Vivaldi se destacó de manera única al alcanzar la fama como creador de composiciones orquestales. En total, su prolificidad como escritor dio como resultado unos 500 conciertos que lo convirtieron en el auténtico maestro del género. El enérgico Concierto para Cuerdas en Sol menor RV 156 es un concierto completo sin solistas destacados, y entre sus múltiples virtudes sobresalen la fuerza de los movimientos exteriores Allegro, tumultuosos y ardientes, y la línea caminante en el movimiento central Adagio.
Concierto para Oboe en Re menor, S.Z799 – Alessandro Marcello
Alessandro Marcello nació en una noble familia veneciana, y aunque su producción fue relativamente pequeña, demostró ser un compositor talentoso. Este concierto para oboe es sin duda su obra más conocida y frecuentemente interpretada. Durante mucho tiempo se pensó que era de Vivaldi y luego se atribuyó a su hermano Benedetto; pero finalmente se demostró que era de Alessandro al descubrirse su nombre en una colección de conciertos del siglo XVIII. Se hizo conocido principalmente por su conexión con Bach, quien transcribió la obra para clavecín y añadió ornamentación extensa al movimiento lento.
Concierto para Violín y Oboe en Do menor, BWV 1060R – Johann Sebastian Bach
Se piensa que la mayoría de los conciertos de Bach fueron escritos entre 1717 y 1723, cuando el alemán ocupaba el cargo de maestro de capilla en el extinto principado de Anhalt-Cöthen. En su biografía compuesta por Johann Nikolaus Forkel (1802), este describió el Concierto para Violín y Oboe en Do menor como «muy viejo», siendo el que nos ocupa una reconstrucción de una versión anterior tal vez para dos violines. Poseedor de tres movimientos, en el Allegro final, el violín se eleva por encima del oboe para mostrar su lado más virtuoso, mientras que en el Adagio ambos instrumentos se entremezclan armoniosamente.
Autor de los textos: Antonio Puente Mayor